Medios filtrantes más comunes
En filtros de lecho profundo, los medios más utilizados son arena sílica, antracita
y granate. La granulometría
debe permitir filtración en profundidad
de 5–10 cm
para retener sólidos entre capas sin elevar en exceso la pérdida de carga.
La forma del grano
influye: un medio áspero y angular
forma vacíos mayores que un grano redondo
del mismo tamaño, por lo que puede dejar pasar más finos. La selección correcta del tamaño efectivo y coeficiente de uniformidad optimiza tiempo entre retrolavados, ΔP
y calidad de efluente.
- Arena sílica:
claridad, soporte a antracita; tamaño efectivo típico 0.5–0.7 mm.
- Antracita:
retención de sólidos gruesos; menor densidad, ubíquela en la parte superior.
- Granate:
alta densidad para capa inferior; mejora la retención de finos.
Cómo aumentar el tiempo de operación de la cama filtrante
Para alargar los ciclos, utilice una cama multicapa
con medios de distinta granulometría y densidad que expandan en retrolavado
y re-estratifiquen
al finalizar.
- Estratificación recomendada:
arriba
antracita (partículas más grandes y menor densidad) y abajo
arena/granate (más finos y más densos).
- Retrolavado efectivo:
ajuste caudal para lograr expansión del 15–25% en arena y 20–40% en antracita. Use agua clara como criterio de paro.
- Mantenimiento:
verifique altura de cama, pérdida de medio y condición de crepinas. Registre ΔP y turbidez/SDI para decidir el momento de intervención.
Esta configuración captura partículas grandes en la capa superior
y finos en la inferior, por lo que el lecho tarda más en saturarse y requiere menos retrolavados.